El problema detectado fueron las extensas filas de espera de las personas, en horas pico, en las agencias de ómnibus de la terminal de Mercedes para despachar o retirar una encomienda, ya que es una misma fila tanto para compra de boletos como para despacho de encomiendas, atendida por una o dos funcionarios.
La solución encontrada fue crear un sistema de despacho de encomiendas inteligente y personalizado, en el que el cliente realiza el despacho de su encomienda colocando el paquete en una balanza que le indicará cuánto deberá pagar; realizará el pago con tarjeta, luego indicará el destino y depositará la encomienda en el lugar correspondiente. Después, un robot será el encargado de llevar el paquete al andén correspondiente cuando sea la hora del embarque del ómnibus.